Hace unos días los medios de comunicación nos dieron a conocer el caso de Eluana Englaro, una chica que llevaba 17 años de los 38 que tenía en coma, es decir, casi media vida sin darse cuenta del mundo, de lo que le rodeaba. Mientras, su familia, cada día más agotada y sobre todo su padre que fue el que dio declaraciones a los medios (“Yo soy el único responsable, he sido yo que el que ha llevado esta historia hasta el fin” "si mucha gente viera una fotografía de Eluana en la actualidad se callarían, pero no lo haré jamás") querían una solución para acabar con esta situación, pero era complicado ya que se les plantea el famoso tema de la “eutanasia”. El pasado martes día 10 se produjo el final a raíz de disminuirle la cantidad del soporte nutricional que estaba recibiendo a través de sondas y que dio lugar a un cuadro de deshidratación que produjo un fallo cardiocirculatorio y supuso el final de la vida de Eluana.
La familia sufrirá mucho la pérdida de esta chica pero también podrá descansar de la extenuación que han supuesto estos diecisiete largos años… hasta aquí y para la mayoría de las personas de este mundo a las que les tocara una situación similar todo bien, sin embargo, en los medios de comunicación ya se está cuestionando si el disminuir el soporte nutricional no sería también un modo de eutanasia pasiva. No me puedo creer que haya gente que se meta en esas cuestiones, ¿de verdad lo piensan o se quieren enriquecer a costa de casos como este?
No conocemos sólo esta situación, ya anteriormente podemos encontrar casos similares al de esta chica. En España fueron muy populares las historias de Ramón Sampedro e Inmaculada Echevarría y en el resto del mundo otros como los de Chantal Sèbire (Francia), Terri Schiavo (EEUU), Piergiorgio Welby (Italia)…
La solución a estos casos es difícil pero desde mi punto de vista no imposible, no hay que buscar culpables cuando algo de esto pasa como están haciendo muchos políticos con el caso de Eluana, ni tampoco es preciso que los medios de comunicación se enriquezcan con este tipo de noticias, simplemente ¿por qué no respetar la voluntad del enfermo o de los familiares si estos hacen un testamento vital en momentos de sus vidas en los que sus facultades mentales sean buenas?
Mientras asociaciones y grupos de apoyo se plantean cómo hacer este tipo de testamentos y se molestan en hacer propuestas, existen políticos más interesados en echarles la culpa a la oposición en lugar de dar soluciones y a la par los medios de comunicación se plantean titulares como: “Eluana, ¿muerte digna o crimen?”
2 comentarios:
Valiente entrada Marta, sobre un tema tan delicado.
Siempre me impresionó lo claro que lo tienen algunos, pero sobre todo me sobrecoge la autoridad que se otorga cierta gente para tomar decisiones por los demás en situaciones tan difíciles. El testamento vital es una via válida como propones. En la actualidad con los avances en todos los campos de la medicina, la pregunta que yo me hago es si puede ser ético obligar a una persona a agotar todas los recursos terapéuticos que nuestra actual tecnología ofrece. Un saludo, Kiko
Sin duda ese es el dilema principal de estas situaciones, si las decisiones de hacer todo lo posible son éticas o no.Y también es importante no generalizar ya que cada patología, cada paciente con su red familiar y social correspondiente tienen unos principios por los que rigen su vida... sé que es una entrada fuerte pero a la par la considero muy interesante... Un saludo
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