Hablamos del Virus del Papiloma Humano (VPH) pero, ¿estamos bien informados?

El VPH (Virus Papiloma Humano) es un virus de transmisión sexual. El contagio se da sobre todo a través de relaciones sexuales y a veces por contacto piel a piel. Al menos 50% de las personas que han tenido experiencias sexuales tendrán el VPH en algún momento de sus vidas. No es un virus nuevo, a pesar de esto, muchas personas no saben de él. La mayoría de los infectados no presentan síntomas y este virus puede incluso desaparecer por acción del sistema inmunológico de la persona afectada sin causar daños a la salud. Tanto el hombre como la mujer pueden contagiarse y transmitirlo sin darse cuenta. Debido a la posible ausencia de síntomas, una persona puede tener el VPH a pesar de que hayan pasado años desde el contagio.
Existe más probabilidad de contraer el virus si:
- Se mantienen relaciones sexuales a una edad temprana.
- Se tienen varias parejas sexuales.
- Si un miembro de la pareja ha tenido muchas parejas sexuales.
De los 4 subtipos más conocidos del virus, se relaciona el subtipo 16 y 18 con el 70% de los cáncer de cérvix (o cuello uterino) y los subtipos 6 y 11 con el 90% de las verrugas genitales.

¿Qué es la vacuna para el VPH y cómo funciona?
La vacuna combate la enfermedad y crea resistencia. No es un virus ni vivo ni muerto sino atenuado. La vacuna previene las infecciones de los VPH tipo 6, 11, 16 y 18.
Las pruebas realizadas en la vacuna demuestran únicamente problemas menores (algunas personas presentan un poco de fiebre tras ser vacunadas, otras, tienen un poco de irritación en el área donde se colocó la vacuna.
La vacuna tiene alrededor de 95 a 100% de efectividad contra el VPH tipo 6, 11, 16 y 18.
Las investigaciones han aprobado la vacunación en niñas y mujeres con edades entre los 9 y 26 años. Es preferible vacunarse antes de comenzar cualquier actividad sexual.
Son 3 inyecciones. Una vez aplicada la primera, necesitará vacunarse por segunda vez 2 meses después. La tercera vacuna debe ser inyectada 6 meses después de la primera. Se está investigando si será necesario después de estas tres dosis vacunarse de nuevo al cabo de unos años.
La vacuna no trata ni cura el VPH. La inyección ayuda a que una persona que ya tiene algún tipo de virus no se infecte por los otros tipos. Por ejemplo, si usted tiene el tipo 6, la vacuna lo protegerá de adquirir los tipos 11,16 y 18.

Mala suerte en algunos casos.
Hace unos días conocimos en los medios cómo en la Comunidad Valenciana se dieron dos casos de reacciones adversas graves a las vacunas del papiloma humano. Se produjeron en dos jóvenes que aparentemente no tenían ninguna patología de base y tardaron sólo unos 8-10 minutos desde la administración de la vacuna a la aparición de la reacción, poco tiempo si tenemos en cuenta que las reacciones a las vacunas suelen aparecer pasadas unas horas…
La primera medida fue la de retirar el lote de vacunas responsable de estas reacciones deteniendo simultáneamente la administración de vacunas en la comunidad y por supuesto como objetivo prioritario la atención de estas niñas, que ahora mismo se encuentran en la unidad de cuidados intensivos con un estado de salud controlado y estable. Hoy se ha vuelto a vacunar en dicha comunidad contra el papiloma humano siguiendo por supuesto la investigación de estos dos casos de los que se extraen ya otras teorías como las de enfermedades no manifiestas y que se han podido potenciar con la administración de la vacuna y otras similares.
Mi opinión cómo enfermera es la de aprovechar esta oportunidad que los avances nos brindan para evitar enfermedades. Las vacunas son medios muy importantes que nos ofrecen protección frente a microorganismos de diversa índole eso sí, tampoco hay que pasarse, el calendario vacunal tiene que estar al día y si podemos beneficiarnos con otras como las del papiloma humano muy bien pero vacunas las justas que como todo tienen su lado positivo y por su puesto el negativo.

Desde aquí mis mayores deseos para que estas chicas se recuperen